J.R.GIL.foto enric-juliana
J.R.GIL.foto enric-juliana

ROJALES 11-07-2014

Dos redactores del Diario Información de Alicante publicaron el pasado domingo día 6 de julio un especial, pero no de fiestas, sino sobre el Caso Brugal. Nada más ni nada menos que nueve  páginas. Y ello por orden, y digo por orden, porque el director de este periódico, Juan Ramón Gil, no pide, ordena.

El instigador de este amplio reportaje crea una situación similar a cuando una persona acude al confesionario de una iglesia. Busca redimirse de sus pecados, o bien aparentar que se redime. En el tema en cuestión creo que es para salvaguardar una imagen bastante deteriorada de este diario y sobre todo de su director. Una situación que más pronto a más tarde podría comprenderse escuchando las grabaciones en poder de la investigación del Caso Brugal .

En los últimos tiempos cualquier persona que  intente  estar bien informado sobre las presuntas corruptelas del Brugal, no ha tenido más remedio que ojear las páginas de la edición del Diario El Mundo-Alicante o escuchar la Ser de Alicante.

Nueve páginas publicadas en Información. Y en domingo. Una huida  hacia adelante. Algo similar al maquillaje que han protagonizado muchas entidades bancarias en sus cuentas para poder continuar. ¿hacia donde?.

La publicación habla por sí sola. Incluye la reproducción de un total de 35 artículos de este periódico referidas al Brugal. Todas ellas comprendidas desde el año 2010 al 2012.  Pero,  ¿y los años 2013 y 2014?. ¿No ha pasado nada en este periodo?; ¿la investigación ha sido paralizada?. Ojeando el diario El Mundo o escuchando la Ser, da la sensación de que no; da la sensación de que en estos años la investigación ha seguido avanzado, implicando a más y más cargos políticos. El Diario Información y su director a la cabeza parece que han perdido agilidad periodística y se les  escapa los aconteceres que desprendía de manera continua la investigación del Brugal. Las nueve páginas publicadas el pasado domingo solo se pueden interpretar como “los últimos suspiros de un moribundo”.