“Sobre el proyecto de una macroplanta de basura en San Miguel de Salinas”

Cambiemos Orihuela

 

26-07-2018

Lamentamos que la inacción y la falta de diligencia del Consorcio de Residuos de la Vega Baja, y de la Consellería de Medio Ambiente, termine abriendo las puertas a macroinstalaciones muy lejanas de la estrategia “residuo cero”, se renuncie a crear un tejido económico y laboral de economía circular, y a una mejor protección del medio ambiente.

La noticia saltaba hoy, aunque los rumores circulan desde hace muchos meses, y es que se planea instalar una macroplanta de basuras en la localidad vecina y hermana de San Miguel de Salinas. En esta ocasión, y a pesar de la opacidad, y de la falta de transparencia -habituales en el Consorcio y en su Presidente-, sabemos gracias a la prensa que la empresa OHL habría presentado un proyecto para instalar una planta que recibiría 100.000 toneladas anuales de residuos, la mitad de lo que se produce en la Vega Baja. También sabemos que pasará hoy por el pleno del Consorcio, no sabemos si también apareció en la mesa de Pineda, como otro proyecto de planta de transferencia, esta vez de Ferrovial.

Lo cierto es que de las promesas y compromisos, tanto del presidente Pineda, como del Director General de Calidad Ambiental, Joan Piquer, trasladadas en una reunión a Cambiemos Orihuela, no se ha cumplido nada. “Nada de vertederos”, y no sabemos dónde va a ir el 50% de los descartes que contienen las bolsas de basura, puede que a un vertedero, o puede que a una incineradora -en sus diferentes formas eufemísticas- a las que se le abre también la puerta en el borrador del nuevo Plan Integral de Residuos. Por mucho que se esfuercen en presentar, en distintas excursiones, como ideal un modelo de macroplanta tipo Algimia, no lo es, pertenece al pasado, no cumple con la estrategia de “residuo cero”, y es un coste importantísimo para la ciudadanía, que aparte de otras consideraciones, la hipotecan y limitan sus posibilidades de avanzar en la reducción del problema al ritmo que lo hace la tecnología. Seguimos esperando medidas -¡cualquiera!- en materia de reducción en origen, de despliegue de ecoparques, mejora e instalación de infraestructura de reciclaje, y sobre todo recogida por separado, y elementos que posibiliten transformar la fracción de residuos orgánicos en compost de calidad para la agricultura.

No hay solución, ni futuro, en macroplantas ineficientes, ni en contaminadoras incineradoras y vertederos, ni en plantas de trasferencia que concentren y compriman el problema para llevárselo a otros. Lo que no queremos para Orihuela no lo queremos para nadie, y Orihuela, como uno de los dos municipios que más residuos genera tiene que aceptar su responsabilidad adoptando e impulsando alternativas.

Las alternativas pasan por infraestructuras de menor tamaño, que traten los descartes (mal llamada basura, porque son recursos en potencia) cerca de los puntos de producción. Que se implanten medidas, como primer paso, de reducción en origen, principalmente de recogida y compostaje de la materia orgánica, que supone por lo menos la mitad de los residuos que acaban en vertedero, y cuyo uso para la agricultura, que también está localizada cerca de los puntos de generación, es muy valioso. Por último se debe mejorar el sistema de reciclaje, la recogida de podas (también fundamentales para el compostaje), y la colaboración con cooperativas y empresas de recuperadores.

El potencial a nivel social, económico, y ecológico de una estrategia “residuo cero” es tremenda en contraposición al sistema de macroplanta. Aunque no paren de insistir con la falacia de que el sistema actual de macroplantas que nos intentan imponer “por la puerta de atrás”, puede generar empleo y solucionar el problema de los residuos. La economía circular, aplicada con esa estrategia de “residuo cero”, genera una cantidad de empleo muy superior, convierte en recursos valiosos lo que eran desechos, y protege el medio ambiente; aparte de suponer a medio plazo un ahorro considerable para los bolsillos de los contribuyentes.

Por todo esto, desde Cambiemos Orihuela, exigimos al Consorcio y a la Consellería que desistan de tomar el rumbo macro, y se apunten al micro, orientado a “residuo cero”; que tomen medidas inmediatas de reducción y la implementación de una gestión separada de los residuos orgánicos; y por supuesto que acaben con esta política de opacidad. Al Gobierno Local le exigimos el inmediato diseño de un Plan Local de Residuos bajo la estrategia de “residuo cero”, tal y como permite el nuevo Plan Integral de Residuos de la Comunidad Valenciana.