– El detenido ocupó ilegalmente una vivienda, la cual transformó en un punto de venta de drogas.
-Cuando el legítimo propietario volvió a ella y le sorprendió en su interior, le recibió con un arma de fuego.
– Sorprendentemente, la víctima también terminó siendo detenida, pues tenía en su poder un coche de alta gama, sustraído en su país de origen.

TEXTO L.C.I.

MIÉRCOLES 29-01-2020

La Guardia Civil ha detenido en Torrevieja a un hombre, por los presuntos delitos de robo con violencia e intimidación, tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas, usurpación de vivienda y por resistencia y desobediencia a agentes de la Autoridad. La víctima del delito de usurpación de vivienda ha terminado por ser detenida también, a raíz de la investigación, por un presunto delito de sustracción de vehículo a motor y otro de falsedad documental.

El pasado 17 de enero, la Guardia Civil de Torrevieja recibió el aviso de un ciudadano sueco quien afirmaba que, al volver a su casa, sita en dicha localidad, tras haber pasado una temporada fuera de ella, se había encontrado con una persona en su interior, supuestamente robando en el domicilio y que todavía estaba dentro.

Los agentes se desplazaron inmediatamente al lugar. Nada más llegar, pudieron escuchar dos detonaciones, identificándolas claramente como disparos. Se adentraron rápidamente en la vivienda, pudiendo presenciar cómo un hombre, que se encontraba ante la entrada de la casa, disparaba dos veces más contra otro (el propietario de ésta), afortunadamente sin alcanzarle.

El autor de los disparos, al percatarse de la presencia de los agentes, emprendió la huída, siendo perseguido por éstos, mientras él aun portaba el arma en la mano, con el correspondiente peligro que eso conllevaba hacia la vida de los guardias civiles actuantes.

El hombre se adentró en una zona próxima de acantilados, donde finalmente fue alcanzado y detenido, interviniéndole la pistola.

A raíz de la investigación desarrollada posteriormente, se ha podido saber que el detenido, un español de 25 años, había ocupado ilegalmente la vivienda del ciudadano sueco, aprovechando su ausencia, en la que había instalado un punto de venta de droga. Dicha vivienda se encontraba en la cima de un acantilado, siendo este lugar muy tranquilo y propicio para dicha actividad ilícita, alejado de la interferencia de vecinos o de terceras personas.

En el registro del citado domicilio se ha intervenido una bolsa con 86 pastillas de éxtasis (MDMA), 27 gramos de cogollos de marihuana, una gran variedad de medicamentos de curso legal pero utilizados para el “corte” de la cocaína, útiles para el pesaje y manipulación de sustancias estupefacientes, un revólver de fuego real con 15 cartuchos, una pistola detonadora del calibre 8mm con 47 cartuchos, una defensa eléctrica (táser) de grandes dimensiones simulando ser una linterna, un machete de 1 metro 30 cms, una defensa extensible, un bate de béisbol, además de dinero en efectivo, varios teléfonos móviles y otros efectos, susceptibles de haber sido sustraídos.

De la investigación se ha desprendido que, el posible motivo por el cual el detenido estaba tan fuertemente armado, era la previsión, preparación y respuesta ante un posible “vuelco” de la droga, es decir, que otros grupos criminales le intentasen robar la sustancia estupefaciente. Este podría ser el motivo por el cual el detenido habría recibido a tiros al propietario legítimo de la vivienda, aun por determinar.

Por todo lo anterior, al detenido se le imputan los presuntos delitos de robo con violencia e intimidación, tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas, usurpación de vivienda y el de resistencia y desobediencia a agentes de la Autoridad.
La Autoridad Judicial le ha decretado el ingreso en prisión provisional, sin fianza, a la espera de juicio.

De víctima a detenido
En cuanto al propietario de la vivienda en cuestión, el ciudadano sueco, de 39 años, tras hacer las comprobaciones pertinentes sobre su identidad, los agentes investigadores descubrieron que el vehículo que conducía constaba como sustraído en Suecia, lugar dónde había sido denunciado su robo y verificaron que las placas de matrícula que éste portaba pertenecían a otro coche, que nada tenía que ver con el investigado, uno de alta gama que supera el valor de 70.000 euros en el mercado.
Como consecuencia, la víctima fue también detenida, en su caso, por un presunto delito de sustracción de vehículo a motor y por otro de falsedad documental.