– Puig reivindica la recuperación de la memoria de quienes fueron encarcelados por defender la libertad como una muestra de ‘cultura democrática’

– El acto ha contado con la presencia de Joan Busquets, que estuvo preso de 1950 a 1964, y de Vicente Cánovas Morant, que estuvo preso de 1940 a 1941

– La Generalitat quiere contribuir a rescatar del olvido a los presos para que pasen a formar parte de la historia de la Comunitat Valenciana

TEXTO L.C.I./E.D.G.

15/11/2016foto_01_homenaje_presos

 La Generalitat ha recordado a los miles de presos que sufrieron cárcel en San Miguel de los Reyes por motivos políticos durante la dictadura franquista en un homenaje en el que han participado Joan Busquets, que estuvo preso de 1950 a 1964, y Vicente Cánovas Morant, preso de 1940 a 1941.

Este homenaje es un acto de reparación histórica dirigido a las personas que estuvieron presas por cuestiones ideológicas y políticas y a los familiares que sufrieron la ausencia de las personas encarceladas. Al acto ha asistido el President de la Generalitat, Ximo Puig; la vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra; el conseller de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà; y la consellera de Justicia, Administración Pública, Reformas Democráticas y Libertades Públicas, Gabriela Bravo.

El President de la Generalitat, Ximo Puig, ha descubierto un monolito que recibirá a los visitantes de San Miguel de los Reyes y en el que se puede leer el siguiente texto de Miguel Hernández: “Tristes armas si no son las palabras”. La escultura está dedicada a “las miles de personas libres que no dejaron de serlo entre los muros de esta cárcel durante la dictadura franquista; a ellas les debemos nuestra libertad y nuestra obligación de construir una sociedad justa, solidaria, culta y feliz”, reza el monolito.

“Es obligación de los poderes públicos, es nuestra obligación recuperar nuestra memoria democrática”, porque “su preservación es, por definición, una manifestación de cultura democrática”, ha señalado el President, quien ha agregado que “la memoria del pasado y la pedagogía social hacia el futuro son factores de orgullo para el pueblo valenciano”. “Nadie quiere revancha; los valencianos queremos normalidad democrática y reconocimiento, porque en la democracia no hay vencidos”, ha subrayado también. foto_04_homenaje_presos

Puig ha destacado en este sentido la importancia de dar visibilidad a unas “historias de resistencia” que han servido de inspiración para formular medidas de “reparación” como el anteproyecto de Ley de Memoria Democrática y para la Convivencia aprobado la semana pasada por el pleno del Consell. “Ahora, con muchos años de retraso, sacamos de entre los barrotes y hacemos libres las historias”, ha resaltado el President.

La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha recordado que el objetivo de esta ley es preservar la memoria histórica como expresión de la libertad y la reivindicación de las conquistas ciudadanas por ese derecho. Además, ha afirmado que este homenaje reconoce a las personas que sufrieron la persecución y la prisión por su defensa de la justicia y la libertad, y por la que algunos sufrieron el exilio y la muerte.

Oltra ha añadido que la recuperación del relato de las vidas que estas familias han vivido “es el paso imprescindible para llegar al respeto por la convivencia” porque “sin memoria no hay futuro, sin justicia no hay presente y sin verdad no hay convivencia”.foto_02_homenaje_presos

Con este homenaje, la Generalitat quiere contribuir a la recuperación de la memoria y a rescatar del olvido a los presos de San Miguel de los Reyes para que pasen a formar parte de la historia valenciana.

Así lo ha manifestado el conseller de Educación, Cultura y Deportes, Vicent Marzà, quien ha hecho hincapié en la transformación cultural del monasterio de San Miguel de los Reyes. “San Miguel de los Reyes es hoy uno de los espacios culturales más importantes del País Valencià; un lugar donde se trabaja día a día por la cultura y la lengua propia de los valencianos, y eso tiene un poco de justicia histórica”, ha declarado Marzà.

El conseller también ha asegurado que “no hay mejor antídoto contra el fascismo y la intolerancia que la cultura” y que el “mejor homenaje posible para las personas que sufrieron la cárcel en sus muros” es que hoy el monasterio sea un “lugar de cultura”.

La Conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, a través de la Dirección General de Cultura y Patrimonio, va a colaborar con el Aula de Memoria Histórica y Democrática de la Universitat de Valencia para iniciar una línea de investigación que recopile datos y reconstruya la historia del penal de San Miguel de los Reyes como prisión de presos políticos. El estudio comenzará en San Miguel de los Reyes pero se extenderá a la cárcel Modelo de Valencia, a Portaceli y la cárcel de Mujeres.

Durante el homenaje se han proyectado en la fachada del monasterio fotografías antiguas de los presos y los nombres que familiares de los encarcelados han facilitado a la Dirección General de Cultura y Patrimonio a través del correo presosensanmiguel@gva.es, y que sigue abierto a los ciudadanos que quieran facilitar información.

Testimonios del homenaje foto_03_homenaje_presos

Joan Busquets ha relatado la vida diaria en el penal de San Miguel donde cumplió la mayoría de los 20 años a los que fue condenado. Busquets es un anarquista afiliado de la CNT, nacido en Barcelona en 1928, que sufrió prisión en San Miguel de los Reyes de 1950 a 1964, año que fue trasladado al penal de Burgos donde terminó su condena. También ha participado en el acto Vicente Cánovas Morant, que estuvo preso de 1940 a 1941.

El monasterio de San Miguel de los Reyes fue mandado construir por los duques de Calabria, doña Germana de Foix y don Fernando de Aragón, sobre un antiguo recinto cisterciense, en el siglo XVI.

San Miguel de los Reyes fue cárcel de presos comunes desde 1856. Al acabar la Guerra Civil, la mayoría de los presos que ocuparon sus celdas eran políticos. En 1966 una orden ministerial suprimió el monasterio como penal y desde el año 2000 es la sede de la Biblioteca Valenciana Nicolau Primitiu.