Las incautaciones se han realizado tras dos operaciones iniciadas en el ámbito de los controles aduaneros en el puerto y el aeropuerto y desarrolladas y ejecutadas por la Guardia Civil en el ámbito penal.
Durante otra inspección de la Patrulla Fiscal en Crevillente, se incautaron 1.814 cajas de juguetes de contrabando, que tampoco habían pasado los controles necesarios de seguridad para los niños.
TEXTO L.C.I.
DOMINGO 24-02-2019
La Guardia Civil y la Agencia Tributaria han llevado a cabo dos operaciones contra las falsificaciones, que ha culminado con la investigación de cuatro personas como presuntas autoras de un delito contra la propiedad industrial. En total se han intervenido 24.853 prendas, cuyo perjuicio para las marcas asciende a 1.267.100 euros.
Así mismo, en la localidad de Crevillente, la Guardia Civil levantó acta administrativa por una infracción de contrabando de 1.814 cajas de juguetes y que no habían pasado las inspecciones pertinentes de seguridad.
Operación “Nilian” iniciada en el aeropuerto de Alicante-Elche
La primera operación se realizó en el aeropuerto de Alicante-Elche al descubrir, en la maleta de una ciudadana china, 8.600 logos falsificados de una marca de renombre. Sin domicilio conocido en España y tan sólo con un pasaporte de turista, investigadores de la Oficina de Análisis e Investigación Fiscal (ODAIFI) de la Guardia Civil, lo tuvieron muy complicado para averiguar el destino final al que acudiría esta mujer para colocar esos logos.
Las pesquisas llevaron a los agentes hasta un familiar que residía en Elche. Casualmente, este familiar trabajaba en un comercio al por mayor y por menor de prendas de vestir y calzado, situado en un polígono industrial de esa ciudad. Pero realizar una inspección del establecimiento en ese momento, habría desvelado sólo una parte del presunto delito de falsificación.
Decidieron continuar con vigilancias discretas sobre las personas relacionadas con el local, y averiguaron que frecuentaban dos almacenes en el mismo polígono industrial. Las visitas eran asiduas pero cortas. Siempre entraban a escondidas por una puerta del lateral, nunca por la principal.
El día de la inspección definitiva de los tres locales, incautaron 7.344 pares de calzado deportivo falsificado de dos marcas conocidas. Una vez puestos en contacto con las marcas, éstas confirmaron que se trataba de falsificaciones, que en su totalidad, habrían causado un perjuicio económico de 166.580 euros.
Finalmente, la Guardia Civil ha investigado a tres personas, dos hombres de 41 y 42 años, y una mujer de 66, todos de nacionalidad china, por un delito contra la propiedad industrial.
Un contenedor en el puerto con 4.539 piezas valoradas en 1.100.520 euros
En el Puerto de Alicante, componentes de la Oficina de Análisis e Investigación Fiscal (ODAIFI) de la Guardia Civil y agentes de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, procedieron a la investigación de una ciudadana argelina (37), como presunta autora de un delito contra la propiedad industrial, tras hallar en el interior de un contenedor 4.539 piezas de prendas de vestir, calzado y complementos de 17 marcas nacionales e internacionales de renombre.
Esta mujer trató de burlar los controles aportando documentación que decía que en el contenedor había 258 cajas de prendas de cuello de cisne procedentes de Turquía con destino Argelia. Pero los controles exhaustivos a los que está sometida la aduana por la Guardia Civil y por Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, permitió detectar las falsificaciones.
Tras realizar un reportaje fotográfico de las unidades de cada marca, éstas se remitieron a las firmas de moda, quienes verificaron su falsedad y se han personado en el procedimiento como afectados. El valor del perjuicio estimado asciende a 1.100.520 euros.
Infracción de contrabando por carencia de etiquetado en juguetes en Crevillente
En la localidad de Crevillente, la Guardia Civil ha realizado la inspección en un comercio dedicado a la venta de juguetes, en la que se han intervenido 1.814 cajas de juguetes de contrabando, valorados en 6.147 euros, por falta de etiquetado, carencia de documentación del responsable importador y en las que el etiquetado no figuraba en castellano.
Esta práctica supone un riesgo para la seguridad de los niños, a quienes van dirigidos los juguetes, pues carecen de los controles a los que habitualmente se someten estos productos.
La Patrulla Fiscal y Fronteras (PAFIF) de la Guardia Civil de Santa Pola que realizó el registro, procedió a denunciar a la gerente de este establecimiento por una infracción a la Ley de Contrabando por las carencias mencionadas y otra infracción al Real Decreto sobre la Seguridad de los Juguetes de la Generalitat Valenciana.