Julián Carcaño Pareja, exconcejal y militante de Los Verdes
TORREVIEJA 10-09-2015
Dicho, hecho y cristalino. Tal y como lo anunció en rueda de prensa, con fecha 9 de septiembre, José Manuel Dolón ha transferido la cantidad de 3.601,5 euros al Comité Especial de Emergencia Siria de ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados). Es la cantidad líquida de la totalidad de los haberes percibidos por sus asistencias a los órganos del Ayuntamiento desde su elección como alcalde el 13 de junio hasta el 31 de agosto.
La mayor parte de la ciudadanía valora positivamente, tanto en el fondo como en la forma, el gesto del alcalde verde; aunque también, como es normal, surgen voces críticas. Parece que la transparencia se le está atragantando a más de uno.
Algunas críticas proceden de personas que muestran buena fe pero que desconocen cómo funcionan las partidas presupuestarias del Ayuntamiento y de otras administraciones. Cabe indicarles que lo que percibe el alcalde –y otros concejales- es una retribución personal que no se detrae de las partidas de ayudas sociales del ayuntamiento y que lo que hicieron los anteriores gobernantes fue ingresarlo en sus cuentas particulares a la chita callando. El problema de las bolsas de pobreza en Torrevieja y en España no se soluciona con unos pocos miles de euros de un ayuntamiento, sino con un giro social en la política de todo el Estado. Han sido las políticas estatales del PP de rescate a la banca y de recortes sociales las que han propiciado el aumento de la pobreza y de las desigualdades sociales en España, las que han disminuido el número de las personas en paro que perciben el subsidio de desempleo para bajarles los impuestos a los ricos.
Otras críticas proceden de unas posiciones egoístas e insolidarias con respecto a las personas que no son de Torrevieja o que no viven en España. Es evidente que la posición de solidaridad humana e internacional de Los Verdes es muy distinta a la suya.
Por último, están aquellos a los que les ha sentado como un tiro que, en vez del PP, Torrevieja esté gobernada por otras fuerzas políticas. Se dedican a atacar por sistema todo lo que hacen alcalde y el gobierno local sin el menor rubor de caer en las contradicciones más ridículas. A estos voceros les parece mal que el alcalde haya donado los citados haberes para ayuda humanitaria de los refugiados sirios. Pero nada dijeron de sus amigos del PP que se lo llevaban directamente a sus bolsillos.
Poco antes, también les pareció mal que José Manue Dolón desvelara y diera a conocer públicamente, después de estar 24 años solicitando esa información que le negaron de forma sistemática, lo que percibían los ediles por asistir a un consejo de Agamed, y que dijera que los ingresos que él iba a percibir al año como consejero (un total de 1.248 euros netos al año) los donaría a su organización y a entidades humanitarias. Estos demagogos dan a entender que preferían que todo hubiera permanecido oculto y que estaban conformes con los muchos consejeros del PP en Agamed que lo ingresaban directamente en sus cuentas sin que la gente se enterara de ello.
En el colmo de la demagogia, incluso critican que el actual alcalde renunciara a cobrar el sueldo de alcalde y optara por seguir percibiendo su “elevada” pensión de prejubilación de 42.000 brutos al año después de estar 47 años trabajando en el sector privado. Se olvidan de dos cosas: la primera es que el Ayuntamiento se ahorra los más de 90.000 euros anuales (incluyendo las cargas sociales) que costaba el sueldo del anterior alcalde, Eduardo Dolón; y la segunda, es que el alcalde verde causó derecho a su pensión para cobrarla en su retiro laboral y, en cambio, está trabajando como alcalde más horas que su antecesor en el cargo sin buscar una retribución económica a cambio ello.
Parece que les molesta que José Manuel Dolón actúe con tanta transparencia en el Ayuntamiento y que esté haciendo con los haberes municipales que percibe exactamente aquello a lo que se comprometió durante la campaña electoral.
Ajo y agua para estos voceros del PP que piden a quien no es de su partido lo que no le pedían a sus amigos del PP cuando gobernaban. Si fueran honestos, también criticarían el sueldo de 75.000 euros al año que percibe Eduardo Dolón como Vicepresidente de la Diputación de Alicante, montante al que habría que sumar las cantidades que ingresa por dietas y asistencias a órganos vinculados a la diputación (hasta la fecha, sólo ha dicho que iba a donar los ingresos por asistencias al Ayuntamiento).
Dentro del proceso de transparencia democrática que está experimentado el Ayuntamiento, cabe destacar el hecho de que las reuniones de la Junta de Gobierno se han abierto a ediles de la oposición; una oposición a la que se le facilita en tiempo y forma la documentación y las actas de esas reuniones.
Esto contrasta de forma radical con el funcionamiento oscurantista de los anteriores gobiernos locales del PP, que nunca posibilitaron la asistencia de representantes de la oposición a la Junta de Gobierno y que entregaban tarde y mal la documentación requerida por la oposición.
Está claro que con el actual gobierno local no va a ocurrir lo que sucedía bajo la alcaldía de Eduardo Dolón, cuando, por ejemplo, tardó más de tres años en facilitar la información solicitada por los ediles verdes sobre las cantidades percibidas por el exalcalde hernández Mateo por sus asistencias a los órganos del ayuntamiento durante su último mandato. En septiembre de 2014, Los Verdes desvelaron lo que el PP guardaba como si fuese un secreto de Estado: que, además del sueldo de diputado autonómico y de los ingresos sin determinar por “actividades” industriales, el exalcalde percibíó por sus asistencias a órganos del Ayuntamiento la cantidad de 61.000 euros en 2009 y lo mismo en 2010 (sin contar las dietas y asistencias a otros órganos como el consejo de Agamed, tribunales para exámenes, etc.).
En el Ayuntamiento de Torrevieja, la transparencia significa, en gran medida, acabar con el secretismo en el uso del dinero público. También se acabaron las reuniones innecesarias de los órganos de gobierno para “hacer caja”, tal y como hablaron Joaquín Albaladejo y José Antonio Sánchez en enero de 2012 en aquel correo electrónico que fue más indiscreto que el famoso uso que algunos ediles del PP le dieron a los móviles municipales.
