VOLVERÁ A PRESENTAR ALEGACIONES A FAVOR DE LA PROTECCIÓN DE LA HUERTA TRADICIONAL DEL MUNICIPIO

TEXTO L.C.I./E.DE GEA

ALMORADÍ 02-05-2020
 Ante la noticia de  que el Ayuntamiento de Almoradí mantiene, en la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), la reclasificación a urbanizable de más de 500.000 m2 de Huerta Tradicional en la pedanía de El Saladar para la construcción de un macrocentro comercial, la Asociación de Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) considera que es completamente irresponsable que se mantenga una de las actuaciones más agresivas planteadas en este documento y se continúe urbanizando grandes extensiones de terrenos inundables, actuando como si el escenario de crisis climática en el que nos encontramos no existiera.
El grupo ecologista recuerda que en 2010 presentó alegaciones a la versión preliminar del mencionado PGOU y que éste lleva tramitándose desde 2003, al haber sido rechazado en varias ocasiones por la Administración autonómica a causa de los desarrollos urbanísticos en zonas inundables y los desaforados crecimientos urbanos que contenía y anuncia que volverá a presentar alegaciones a favor de la protección de la Huerta Tradicional del municipio.
Ya hace 10 años AHSA pedía al Ayuntamiento de Almoradí que debía ponerse en valor los terrenos de la Huerta Tradicional asociada al río Segura y a su red de azarbes, por su importante valor ambiental, cultural y económico. Que se estructurará un corredor ecológico que uniera la Huerta Tradicional y el cauce del Segura con el Hoyo Serrano y el Parque Natural de las Lagunas de La Mata y Torrevieja. Además de pedir como alternativa un modelo de urbanismo compacto en torno al núcleo tradicional de Almoradí que responda a las necesidades reales de la población y que garantice la protección de los espacios de valor ambiental y paisajístico afectados por el planeamiento.
Según AHSA, el agravamiento de las consecuencias de las inundaciones a causa de la urbanización de la Huerta Tradicional, por el efecto barrera de las construcciones y el sellado de miles y miles de hectáreas que impiden que el suelo drene y absorba el agua caída, parece que no va con el Ayuntamiento de Almoradí. Hace una semanas fue la aprobación de la modificación urbanística para la instalación de la nueva EDAR, también en zona inundable  junto a un azarbe, ahora manteniendo un PGOU con propuestas que van completamente en contra de los más elementales criterios de sostenibilidad y  promoviendo un modelo de desarrollo funesto para la comarca.