Baño primaveral en "Los Lagos de San Isidro" (Alicante). Una antigua cantera cortó una falla por donde mana agua termal del acuífero calizo Triásico de la Vega Baja del Segura (un ejemplo de 'acuífero inferior' no catalogado hasta el momento). Del interior de la roca (abajo, a la derecha de la imagen) y a través de un conducto kárstico sumergido, se ve ascender el agua subterránea hasta la laguna. La temperatura de esta surgencia es de unos 28ºC.
Baño primaveral en “Los Lagos de San Isidro” (Alicante). Una antigua cantera cortó una falla por donde mana agua termal del acuífero calizo Triásico de la Vega Baja del Segura (un ejemplo de ‘acuífero inferior’ no catalogado hasta el momento). Del interior de la roca (abajo, a la derecha de la imagen) y a través de un conducto kárstico sumergido, se ve ascender el agua subterránea hasta la laguna. La temperatura de esta surgencia es de unos 28ºC.

 

El nuevo Plan Hidrológico del Duero define acuíferos superiores e inferioresdiferentes en la misma vertical del terreno. Cataloga 12 masas de agua subterránea superiores y 52 inferiores y dice que: “Dichas masas de agua subterránea se organizan en dos horizontes o niveles superpuestos“. En cambio, en su homólogo Plan Hidrológico del Segura 2009-2015, aún pendiente de aprobar por el Consejo de Ministros, sólo se define uno inferior: el AcuíferoInferior de la Sierra de Segura, en el extremo noroccidental de la cuenca. Los demás (234 en total) son superiores. ¿Pero, es éste el único caso de acuífero profundo que existe en esta cuenca o hay más, como ocurre en la del Duero? Según diferentes estudios del antiguo IRYDA y del IGME sí, bastantes más.

El geólogo Victor Arqued es el actual Subdirector General de Planificación y Uso Sostenible del Agua del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y es el encargado de supervisar los planes hidrológicos de todas las demarcaciones hidrográficas intercomunitarias de España.

Antes de ocupar este puesto, en octubre de 2013, era el Jefe de la Oficina de Planificación Hidrológica de la Confederación Hidrográfica del Duero en Valladolid. Allí definió, por primera vez en un Plan Hidrológico de España, el concepto demasas de aguas subterráneas superpuestas a diferentes profundidades. 

Es decir, acuíferos inferiores y superiores distintos en la misma vertical del terreno y sin conexión hidráulica entre si, al estar separados por potentes estratos impermeables (generalmente de arcillas y margas) de centenares de metros de espesor.

Esto ha supuesto un importante avance en la planificación hidrológica actual en materia de aguas subterráneas, ya que posibilita, y de momento sólo en este caso concreto de la cuenca del Duero, que se puedan otorgar concesiones de aguas subterráneas específicas para cada uno de estos dos acuíferos.

Es decir, y a modo de ejemplo, dos fincas colindantes, pueden obtener sendas autorizaciones de nuevos pozos para riego y estar próximos entre si, pero emplazados en dos acuíferos distintos. Uno de estos pozos, captaría solamente las aguas del superior y el otro únicamente las del inferior.

Y para evitar que el pozo más profundo coja también las aguas del acuífero superficial y se mezclen ambas (algo mucho más frecuente de lo se cree), la Normativa de dicho Plan establece prescripciones técnicas de obligado cumplimiento en la ejecución de estos pozos. Las mismas que también sirven para impedir la entrada de nitratos, procedentes de la actividad agrícola, u otros contaminantes vertidos en el suelo, a los acuíferos profundos.

¿Y en el nuevo Plan Hidrológico del Segura, que es el caso que aquí nos “preocupa”, hay definidos acuíferos inferiores como en el del Duero? Sí, aunque solamente uno: El Acuífero Inferior de la Sierra de Segura que decíamos al principio. 

¿Pero..a parte de éste acuífero inferior, hay más? Según los estudios del IGME y del IRYDA, y que citábamos en la entrada anterior, sí, bastantes más.

Por ejemplo, este acuífero Jurásico, que el Plan del Segura sólo describe en las Sierras  de Cazorla, Segura y las Villas, y que en realidad son dos (Formación Colleras y Formación Chorro, que pueden tener hasta medio kilómetro de espesor conjunto) llega, por debajo de los superiores y de la misma forma que veíamos en el corte geológico de arriba, hasta Socovos, Moratalla, Calasparra, por el sur; y a Jumilla, Villena, Yecla, Montealegre del Castillo y Pétrola por el este.

En cambio, en el sector Elche de la Sierra-Hellín aflora en superficie en muchas zonas. Éstas ya quedaron emergidas desde el Cretácico hasta hoy como islas que nunca más volverían a estar bajo el nivel del mar.

Los sucesivos episodios tectónicos compresivos y distensivos lo cuartearon en distintas subunidades hidrogeológicas profundas; es decir: en otras “masas de aguas subterráneas inferiores“. 

Desde entonces y hasta el día de hoy, estos otros acuíferos, que también existen, esperan ser catalogados de forma separada e independiente de los superiores (Cretácicos, Terciarios y/o Cuaternarios que tienen por encima) por un Plan Hidrológico del Segura que sea más riguroso con estos temas, como lo ha sido el del Duero, y poder así, utilizar sus aguas  de forma sostenible para crear empleo y riqueza, que falta nos hace.


Porque dicha catalogación, dicho estudio de los diferentes acuíferos superpuestos existentes en la cuenca del Segura, ya está hecho desde los años 70 y 80 del siglo pasado por el IRYDA y por el IGME. Sólo hace falta querer.