La vara de mando del último presidente de la II República Española, Manuel Azaña, se exhibe de forma permanente en el vestíbulo de la Casa Consistorial de Elda
-Bravo felicita al Ayuntamiento de Elda por rescatar la vara de mando de Azaña del olvido
– La consellera asiste a la inauguración de la exposición permanente del símbolo junto al ex presidente Rodríguez Zapatero y el alcalde
– Recuerda que la Ley de Memoria Democrática ‘es la forma más firme de construir un futuro de convivencia y concordia en paz y libertad’
TEXTO L.C.I.
ELDA 11/04/2018
La consellera de Justicia, Administración Pública, Reformas Democráticas y Libertades Públicas, Gabriela Bravo, ha celebrado que la vara de mando del último presidente de la II República Española, Manuel Azaña, sea exhibida de forma permanente en el vestíbulo de la Casa Consistorial de Elda.
Gabriela Bravo ha asistido a la inauguración de la exposición del objeto junto al alcalde de la ciudad, Rubén Alfaro y el ex presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero.
La vara de mando era el símbolo material de la Jefatura del Estado de la II República Española. Tras la muerte de Azaña, el bastón estuvo en poder de su viuda, María Dolores de Rivas Cherif -exiliada en México desde 1941- quien lo donó a la Liga Española Pro-Derechos Humanos.
Posteriormente, esta entidad se lo entregó al presidente de la República de Portugal, Jorge Sampaio, para su custodia en el periodo 1996-2006.
Al término de su mandato, Sampañio lo devolvió a la Liga Pro-Derechos Humanos, cuyo presidente, José Francisco Alonso, determinó que la vara fuera donada a la ciudad de Elda en 2007 en reconocimiento a que la capital de la comarca del Vinalopó Mitjà fue la última sede del Gobierno de la República presidido por el doctor Juan Negrín.
La vara fue depositada en el Archivo Histórico Municipal de Elda hasta que ha sido restaurada por el taller eldense de Julián del Olmo para su exhibición permanente en el interior de una vitrina en el vestíbulo de la Casa Consistorial.
Gabriela Bravo ha asegurado que la II República “con sus luces y sus sombras es una etapa de nuestra historia que debemos recordar y asumir”. Para la consellera, que “a algunos les perturbe esa memoria y argumenten que que celebrar el 14 de abril cuestiona nuestro actual sistema democrático basado en la reconciliación nacional” es “una estratagema porque olvidar el régimen republicano conlleva olvidar también la dictadura que le puso fin mediante una ignominiosa guerra civil y ese olvido evita condenar el régimen franquista”.
La consellera de Justicia ha recordado que la reciente Ley de Memoria Democrática y para la Convivencia de la Comunitat Valenciana impulsada por su departamento persigue, precisamente “recuperar la memoria de aquellos episodios” porque “es la forma más firme de construir un futuro de convivencia y concordia en paz y libertad”.
Gabriela Bravo ha asegurado que “la grandeza de nuestra democracia es que, a diferencia de los regímenes totalitarios, es capaz de reconocer la dignidad de todas las víctimas más allá de las opciones personales, ideológicas y conciencia de cada uno”.
Por ese motivo, la vara “es símbolo de rechazo público e inequívoco del franquismo y de los crímenes que perpetró y, a su vez, homenaje también público e incontestable, a la memoria de sus víctimas”, ha concluido Gabriela Bravo.