La fotografía de una joven presidía el salón. Algunos de los presentes derramaban alguna lágrima, se cruzaban abrazos y en algunos momentos se produjo un silencio sepulcral. No se trataba de un entierro pero si de algo parecido o de características por lo menos trágicas. La fotografía correspondía a Koria Badbad Hafed, de 24 años la joven saharaui secuestrada en el sahára desde hace más se seis años. Residía en San Miguel de Salinas hasta aquel nefasto viaje, en enero de 2011, cuando fue a visitar a sus familiares y ya nunca regresó. Lo segundo, las lágrimas, la madre de acogida de Koria Bienvenida Campillo, entre otros. Lo tercero, el silencio durante la proyección y al final del documental títulado “Presas entre dos mundos. La Libertad es su derecho” que exige el regreso de Koria y otras 49 jóvenes saharauis. También se podría haber titulado “Muertas en vida”. Los testimonios de las dos jóvenes saharauis que aparecían en el documento fílmico, Sukeina Enni Sidahmed, de 25 años, y Jadama Mohamed Brahim, de 27, daban buena cuenta de ello y retitulaban el documental. Ambas lograron escapar en 2014 tras más de 5 años de privación de libertad. Relataron cómo vivieron obligadas y sometidas a las decisiones de sus familias biológicas en connivencia con el Frente Polisario. Ahora han decidido enfrentar sus miedos y contar el sufrimiento vivido para demostrar que las retenciones ilegales contra la voluntad de mujeres mayores de edad sí se producen y que a ambas la soledad, el miedo y la desesperación llegaron incluso a llevarlas a intentar quitarse la vida.
Todo esto ocurrió hace unos días en el Centro Cultural de San Miguel de Salinas que acogió la proyección del documental «Presas entre dos mundos», realizado y producido por el colectivo «La Libertad es Su Derecho», formado por familias españolas de mujeres secuestradas y/o retenidas contra su voluntad por sus familias biológicas en los campamentos saharauis de Tinduf, Argelia.
En el acto estuvieron presentes los padres de acogida de Koria, Bienvenida Campillo y José Vicente Mañogil, miembros de la Corporación Municipal de San Miguel de Salinas concejales de otros municipios, la directora del documental, Elisa Pavón así como Tomás Martínez que fue profesor de Koria. También numerosos vecinos de la localidad que quisieron apoyara con su presencia a la familia de acogida de Koria y de otras jóvenes secuestradas.
“Visualizamos hoy el problema de no solo una familia sino de muchas, un problema complicado y complejo que cuenta con la complicidad del Frente Polisario y donde echamos en falta el apoyo decidido de las administraciones españolas” expuso Tomás Martínez.
En este sentido se puso como ejemplo a la joven Koría, secuestrada pese a estar bajo la tutela legal de las administraciones españolas cuando fue secuestrada. Ahora, el Gobierno Valenciano mueve piezas para propiciar su regreso según el compromiso del presidente de la Generalitat, Ximo Puig.
“Tenemos la esperanza de ver pronto a Koria después de seis años casi sin noticias” indicó José Vicente Mañogil. “Nos preocupa mucho su estado de salud” añadió.
Su esposa, Bienvenida Campillo, va más allá. “Desde hace pocas semanas sabemos que está viva. Hemos estado luchando por ella sin saber si estaba viva o muerta. La llamada de recibimos, bajo control, nos permitió hablar con ella. Ahora tenemos más fuerza para luchar por ella y para que vuelva junto a las más de 50 chicas que están en su situación”.
Denuncio que cuando Koria fue secuestrada estaba bajo la tutela de la conselleria de Bienestar Social por desamparo familiar. “Hubo dejación de funciones. A mi me quitaron mi hija de acogida pero a también ellos y no hicieron nada” denuncia.
Debido a la situación en España de Koria, explica Campillo, “es española a todos los efectos y nuestros responsables políticos no la trataron como tal cuando fue secuestrada. Exigimos responsabilidades y soluciones ya”.
La familia Mañogil Campillo espera noticias del presidente de la Generalitat, Ximo Puig y de la vicepresidenta, Mónica Oltra, con los que se reunieron el mes pasado.
