2016 ha sido un año desastroso pues hay que sumar otras adversidades y unos daños por la sequía de más de más de 250 millones de euros, lo que deja una cifra que ronda los 700 millones de euros
Reclama una serie de medidas para compensar a los agricultores y ganaderos afectados
Valencia tiene 151 millones de euros en pérdidas, Castellón más de 91 y Alicante 76
TEXTO L.C.I.
03-01-2016
La Unió de Llauradors estima que el temporal de lluvias fuertes y continuadas con inundaciones en algunas zonas del pasado mes de diciembre, acompañado de viento e incluso pedrisco, ha dejado unas pérdidas directas en el campo valenciano que se acercan a los 320 millones de euros. En esta cuantía no se contemplan otra serie de pérdidas indirectas que sin duda se han producido o se producirán.
A esta cifra hay que sumar la cantidad de más de 250 millones de euros estimada ya en su día por LA UNIÓ por los efectos de la grave sequía y la de otras adversidades climatológicas -como por ejemplo para no retroceder demasiado el pedrisco de finales de septiembre que causó pérdidas de unos 12 millones de euros-, lo que ha provocado que el año 2016 sea muy nefasto para los agricultores de la Comunitat Valenciana. Podríamos estar hablando en conjunto de unas pérdidas climatológicas de cerca de 700 millones de euros pues se ha pasado de un periodo de extrema sequía a episodios de temporales.
Lo más grave de 2016 fueron las lluvias de diciembre, fundamentalmente en el periodo comprendido entre el 16 y el 19 donde se vieron afectadas más de 140.000 hectáreas de cultivo (casi 76.000 en Valencia, más de 39.000 en Alicante y más de 32.000 en Castellón). Por provincias la mayor cuantía se da en Valencia con cerca de 151 millones de euros, seguida de Castellón con más de 91 y Alicante con más de 76 millones de euros). El cultivo con mayor número de pérdidas es el de los cítricos con más de 201 millones de euros, seguido de las hortalizas con 70,4 millones, el caqui con 21,7, el olivar con 20,5 o la uva de mesa con 3,8 millones de euros.
LA UNIÓ indica que tanto el Gobierno de España como la Generalitat Valenciana han reaccionado rápidamente anunciando una línea de ayudas, aunque dirigidas a la reparación de las infraestructuras fuertemente afectadas por los temporales, pero no se ha establecido ninguna medida para compensar directamente a los agricultores y ganaderos afectados. En este sentido reclama esta organización agraria apoyo para que puedan recuperar su capacidad productiva que se ha visto gravemente afectada por los daños sufridos en sus explotaciones pues ya se avanza una elevada pérdida de renta.
De este modo LA UNIÓ ha propuesto un paquete de medidas a las dos Administraciones, algunas de competencia estatal y otras autonómica, que podrían servir a los afectados a superar este episodio climatológico que tantos daños les han causado. Entre ellas destacan las siguientes:
– Impulsar declaración institucional de les Corts Valencianes de apoyo al sector y reivindicación de más inversión en infraestructuras agrarias, a la que se deberían adherir diputaciones provinciales y ayuntamientos.
– Concesión de ayudas de Estado (ayudas de minimis): 15.000 € por empresa agraria en tres años. Reglamento (UE) nº 1408/2013 de la Comisión de 18 diciembre 2013.
– Reducción del módulo en el IRPF para producciones y zonas afectadas.
– Condonación del pago del Impuesto de Bienes Inmuebles de las parcelas cultivadas. Al tratarse de un tributo local, se solicita que la pérdida de ingresos de los ayuntamientos y diputaciones provinciales sea compensada con cargo a los presupuestos generales del Estado.
– Bonificación del 50% de las cuotas de la Seguridad Social durante ocho meses.
– Tasación del seguro e indemnización del daño real en parcela en función de las exigencias comerciales, independientemente de la franquicia establecida. Es decir que se indemnice el 100% del daño real.
– Establecimiento de préstamos con interés subvencionado para los afectados.
– Subvención de los productos fungicidas usados para evitar daños adicionales en producción y plantación.