El alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, recibió este lunes al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, y a la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, con quienes mantuvo una reunión para ultimar los detalles de la recuperación del edificio de los antiguos juzgados tras meses de negociación a través de la Comisión técnica creada para este fin. Así, Bascuñana anunció que finalmente el Ayuntamiento y la Generalitat han alcanzado un acuerdo que “beneficia a nuestro municipio ya que pasa a ser propiedad municipal y su fin será albergar la prestación de servicios públicos”.
El acuerdo alcanzado recoge además el uso de otros bienes inmuebles como es el caso de los Juzgados, ubicados en la Plaza Santa Lucía, ya que se acuerda pactar un arrendamiento anual por diez años, de manera que los cinco primeros años, la Generalitat Valenciana pagará 75.000 euros y los cinco siguientes 125.000 euros. Asimismo, las instituciones acuerdan que dada la necesidad de ampliación de dichas instalaciones, el Ayuntamiento se compromete a facilitar la cesión de suelo para llevar a cabo dicha ampliación. También se recoge la posibilidad de opción a compra por parte de la Generalitat.
Otras de las cuestiones planteadas y que finalmente quedarán resueltas es la cesión de uso del Ahogadero de la Seda, que acogerá actividades relacionadas con los talleres de empleo y otros servicios públicos. En esta línea, también se hará lo propio con el Museo de la Muralla, ya que se iniciarán los trámites sobre la parcela en la que se ubica, y que comparte con el Campus de Las Salesas de la UMH.
En cuanto a la Casa Natal de Miguel Hernández, “la apertura de estas instalaciones será una realidad después de 6 años cerrada al público”, por lo que “podremos disfrutar de ellas en un año tan importante como el 75º aniversario de la muerte de nuestro poeta”. El convenio pretende zanjar el reequilibrio patrimonial entre ambas administraciones, dado que eran múltiples los frentes abiertos en la negociación, lo que finalmente se ha conseguido.
Por su parte el presidente autonómico destacó en relación a los Juzgados que “desde el primer momento estábamos comprometidos a poner una solución a esta anomalía que había que superar mediante el entendimiento”.
Bascuñana agradeció la disposición de la Generalitat y especialmente la de la consellera Bravo “por trabajar con Orihuela con el fin de solucionar este problema enquistado”, mientras que también alabó la labor de los miembros de la mesa técnica quienes han trabajado durante meses por el bien de Orihuela. En ese sentido, en el discurso del primer edil destacaron palabras como colaboración, respeto, responsabilidad y acuerdo histórico; no obstante, el alcalde oriolano aprovechó el encuentro para reclamar al presidente Puig “consenso en materia lingüística para una comarca como la Vega Baja donde el valenciano no es nuestra lengua materna”.
“Gana Orihuela y ganan los oriolanos, quienes recuperan parte del patrimonio que les pertenece tras largos años de desencuentros y sin soluciones, estamos muy satisfechos del resultado que hemos obtenido”, destacó el primer edil. Y puso en valor que tras años de negociaciones “ahora la responsabilidad de buscar consensos ha permitido a ambas instituciones lograr cerrar un acuerdo que, a quien más beneficia es a los ciudadanos”, concluyó Bascuñana.
