La pregunta podría ser esta: ¿Qué es peor/mejor para la imagen de un cargo público, mentir con cinismo o reconocer que uno (o una) también ha podido fumarse un porro, pagado en negro y/o conducido con una copa demás en algún momento? Algunos apuestan por lo políticamente correcto, otros piensan, pensamos, que lo correcto es siempre lo más próximo a la verdad.
Una vez, en una entrevista y siendo ya presidente de EEUU, le preguntaron a Bill Clinton si alguna vez se había fumado vez un porro. Tenía dos respuestas, ambas malas, pero sin duda una peor que la otra. Al final, aunque tampoco tiene que ser cierto lo dicho e intentando no mentir pero tampoco contar toda la verdad, contestó aquello de que “siendo joven lo probé pero no me tragué el humo”. Fue, posiblemente, su única manera de no mentir del todo sin decir toda la verdad.
Hace unos días, Jordi Évole preguntó a quemarropa en el programaSalvados de La Sexta del pasado domingo a Pablo Iglesias y Albert Rivera si alguna vez en su vida habían pagado en negro. Los líderes políticos de Podemos y Ciudadanos tenían difícil la respuesta, se mascaba la tensión sobrevenida, pero, como en el caso del presidente norteamericano, una salida era peor que la contraria. Todo hacerpensar que acertaron ambos.
Pablo Iglesias, más valiente y decidido en este punto, rompió el hielo de la situación y reconoció que “claro que sí” había pagado en negro, ante lo cual Rivera, al que se le veía dubitativo y calculador sobre la respuesta correcta, no tuvo más remedio que hacer un Clinton y reconocer que bueno, que él no recordaba bien, pero que seguro que alguna vez lo habría hecho.
Al día siguiente le preguntaron a Pedro Sánchez si él, como Iglesias y Rivera, también había pagado en negro alguna que otra vez y dijo tajantemente que no. ¿Error? En su respuesta quiso ir más allá que Clinton, Iglesias y Rivera, arriesgando con ello que alguien, ahora sí, le saque las pruebas de que, en el sentido clintoniano del asunto, no solo se fumó el porro que niega haber probado (lo de pagar en negro), sino que es probable que hasta se tragase bastante del humo negro que negó.
La derecha política, negra y mediática que anida tras de algunas cabeceras y de algunas tertulias de este país (también algún socialista despistado) anda estos días con las uñas afiladas intentando hacer que sangre la herida del pago en negro de algunos políticos, y de forma muy especial en lo que respecta a Iglesias. Lo intentan con el cinismo que les caracteriza, pero deberían saber que es este muy probablemente un camino de alas muy cortas en un país atravesado de black, de sobres en B del PP, de Gürtel, de Púnica, deEREs falsos, del 3%… Participar de esa corrupción de baja intensidad que nos rodea y a la que muchas personas se ven aboadas por el propio despiadado sistema está mal, sí, decididamente mal, pero casi peor puede estarlo hacer creer que, como llanero solitario, vive uno solo en el blanco y que la gente pueda llegar a pensar que ese es precisamente tu punto más oscuro. En twitter @plopez58