TEXTO Sergio Arroyo.Presidente de Amigos de los Humedales del Sur de Alicante
FOTOS Jacobo Ramos y Sergio Arroyo
DOMINGO 02-08-2015
Durante estos últimos días del mes de julio, cuando acudimos a la costa para huir del sofocante bochorno, asistimos a un espectáculo que a la mayor parte de las personas les pasa desapercibidas. Todos los años por estas fechas, una vez finalizada la temporada de reproducción, centenares de jóvenes gaviotas de Audouin nacidas en las colonias de cría situadas mas al norte, principalmente la del delta del Ebro que acoge a mas del 60 % de la población mundial de esta especie, se dirigen costeando hacia el sur y deteniéndose para descansar y alimentarse en los escasos tramos de nuestro litoral que se mantienen libre de construcciones. Su destino son las costas del Sahara Occidental, donde pasaran los tres años que tardan en convertirse en adultos, momento en que volverán a la colonia que les vio nacer.
Uno de los lugares donde podemos observar a estos jóvenes, y a otras especies de aves marinas y acuáticas, es la desembocadura del río Segura y su entorno marítimo, donde la abundancia de pescado ofrece un recurso de fácil acceso para las inexpertas gaviotas, que pese a ser aves de estrictos hábitos marinos, remontan el río Segura llegando hasta Rojales, donde ha sido observado algún ejemplar.
Esta especie, endémica del Mediterráneo y que durante años fue considerada la gaviota mas amenazada del mundo, que se encontraba recluida en apartados acantilados de unas pocas islas e islotes, ha visto recuperada su población de forma importante, adaptándose finalmente a la importante alteración de los ecosistemas costeros mediterráneos. Instalando varias colonias de cría en entornos altamente humanizados, como es el caso de las salinas de Torrevieja, una zona húmeda transformada para su aprovechamiento industrial y en el que las gaviotas conviven con la maquinaria pesada y el continuo trasiego de vehículos y trabajadores de las salinas. Precisamente este año, se cumplen 10 desde la instalación de los primeros nidos en 2005, y que ha llegado a convertirse en una de las mas importantes de la especie con mas de 3.800 parejas censadas en 2010.
Durante estos años, AHSA ha colaborado con el parque natural de las lagunas de La Mata y Torrevieja en el seguimiento de esta colonia. Entre las acciones que se han realizado, se encuentra el marcaje de pollos con anillas de plástico con un código individualizado que permite controlar a las aves marcadas sin necesidad de capturarlas y con ello obtener entre otros datos, información de los movimientos de la especie. Cuando es observado un ejemplar anillado, se envían los datos del color de la anilla, el código, la fecha y lugar de la cita a la Oficina de Anillamiento de la Estación Biológica de Doñana, donde están centralizados los datos de los diferentes programas de anillamiento que se realizan en España. Desde allí contestan con el historial del ave observada, donde fue anillada y los lugares y fechas donde ha sido controlada en otras ocasiones.
Para hacernos una idea del interés de la información obtenida, en diciembre de 2007 en el curso de un viaje organizado a las costas del Sahara Occidental en el marco del Proyecto Life de la gaviota de Audouin en la isla Grosa (Murcia) fueron controladas un total de 235 gaviotas de Audouin anilladas, de las cuales 5 correspondían a aves nacidas en Torrevieja en 2006 y 2007.
Un nuevo ciclo se cierra, ahora las jóvenes gaviotas con apenas 2 meses de vida se enfrentan al mas importante reto de su corta vida, llegar sanas y salvas a la costa occidental de África, aunque muchas de ellas quedarán por el camino, otras conseguirán llegar a adultas y volverán dentro de 3 años al Mediterráneo para nidificar.