Cambiemos Orihuela hace una valoración negativa de los primeros pasos del Gobierno Municipal, y rechaza la decisión de Bascuñana de excluir a los representantes políticos de la Mesa de Contratación, “restringiendo así las posibilidades de control democrático de los fondos públicos y la participación de los distintos grupos municipales en los procesos de licitación”.
ORIHUELA 05-07-2015
El pasado 25 de junio, el Alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, tomó la decisión de excluir a los representantes políticos de la Mesa de Contratación, órgano que controla los procesos de licitación, y que quedaría participado únicamente por técnicos municipales. La medida ha sido criticada por la formación Cambiemos Orihuela que a través de sus portavoces, Karlos Bernabé y Marta Guillén, ha mostrado su malestar, “al contravenir Bascuñana esa premisa de diálogo que anunció al comienzo de la legislatura. No ha habido ninguna voluntad por su parte de consensuar una decisión que nosotros consideramos muy importante”, ha señalado Guillén en referencia a la forma de tomar la medida.
El fondo de la cuestión tampoco ha sido del agrado de la Cambiemos Orihuela quien ha expresado que en su opinión despolitizar la acción de la Mesa de Contratación, tecnocratizar el proceso, sería un error porque, según ha dicho Karlos Bernabé: “sí que tiene una componente política. La valoración de las ofertas desde el punto de vista técnico, no tiene que ser necesariamente la mejor opción. Y desde luego, no se debe actuar siempre desde el punto de vista exclusivamente económico, también se pueden integrar otros criterios relacionados con la justicia social o medioambiental”.
Marta Guillén ha criticado la decisión de excluir a los representantes de la Mesa de Contratación, porque, “entendemos el sentir de la ciudadanía tras estos años de corrupción generalizada, pero nuestra responsabilidad es revertir esta impresión y no contribuir con medidas como ésta al desprestigio de la acción política. No debemos presuponer que la presencia de representantes elegidos democráticamente puede enturbiar el funcionamiento de la mesa de contratación, sino considerar que su participación es garantía de transparencia y control democrático en los procesos de adjudicación”.
Finalmente Karlos Bernabé ha declarado: “aunque tengamos confianza plena en los técnicos que evalúan las ofertas y asignan los contratos, la función de los políticos es hacer un seguimiento del desarrollo del proceso, controlar que no haya ningún tipo de irregularidad, y se tengan en cuenta criterios más allá de lo económico. La solución, por tanto, no pasa por eliminar a los representantes políticos de las mesas de contratación, sino todo lo contrario, incluir a los representantes de todos los grupos políticos, como hacen ya ayuntamientos progresistas, como el de Alicante”.