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LUNES 26-05-2015

Ecologistas en Acción del País Valenciano y Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) hemos presentado observaciones de rechazo al Documento Inicial (DI) presentado por ACUAMED a la autoridad ambiental, que pretende conducir hasta 15,6 hm3 de agua desalada de la desaladora de Torrevieja a diversas parcelas agrícolas, con una extensión de más de 3.100 hectáreas al considerar que es inviable e incompatible con la actual normativa hidrológica y ambiental. El proyecto pretende conducir agua a parcelas agrícolas que se supone son nuevos regadíos, en su mayoría de cítricos y almendros, de rentabilidad dudosa. Las tuberías de hasta 1,4 m de diámetro irían desde la conexión de la desaladora de Torrevieja al embalse de la Pedrera a una balsa y estación de bombeo en Torremendo, posteriormente atravesarían la Sierra de Escalona, con una gran balsa de regulación próxima al alto de Rebate de 15.000 m2 de superficie, hasta conectar con las conducciones de la desaladora de Valdelentisco en Murcia.

Consideramos que el proyecto es incompatible con las determinaciones del Plan Hidrológico de la Demarcación del Segura (PHDS) aprobado en julio de 2014.

Que según establece en ese Plan como “norma general, y salvo las excepciones expresamente contempladas en esta Normativa, no se otorgarán concesiones o autorizaciones de aguas que impliquen la asignación de nuevos volúmenes o el incremento en la demanda real de las explotaciones existentes como consecuencia de un cambio en sus características esenciales, ni tampoco aquellas orientadas a la generación de nuevos regadíos o áreas de demanda, hasta que se garantice que no producen incidencia negativa alguna sobre los objetivos medioambientales planteados y siempre que no se prevea que produzcan afecciones a terceros.” Además el artículo 33.4 de la Normativa del PHDS establece la prohibición de destinar los recursos desalinizados a la generación de nuevos regadíos o a la ampliación de los existentes.

En lo que respecta a la afección ambiental, el proyecto tendría unos impactos críticos o severos sobre la Red Natura 2000 y que afectaría a una superficie significativa de la Sierra de Escalona que es un espacio natural que forma parte de esta red por haber sido declarada como ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) y LIC (Lugar de Interés Comunitario).

Recordamos que se encuentra en trámite de aprobación por parte del Gobierno Valenciano la declaración de Parque Natural de la Sierra de Escalona y la Dehesa de Campoamor, figura contemplada en la ley de Espacios Naturales Protegidos de la Comunidad Valenciana. De hecho, el Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN) y el Proyecto de Decreto de Declaración de Parque Natural se sometieron a información pública en 2007. Asimismo están pendientes de aprobación por el Gobierno Valenciano las Normas de Gestión de la ZEPA y LIC de este espacio de la Red Natura 2000, en cumplimiento de la Directiva Europea de Hábitats.

El Documento Inicial admite que la superficie que será transformada supondría la desaparición de una superficie del hábitat de caza de aves protegidas, como el Búho Real (Bubo bubo), con poblaciones nidificantes excepcionales, o como el Águila-azor perdicera (Hieraaetus fasciatus) y el Águila real (Aquila chrysaetos), que tienen en la Sierra de Escalona una de sus principales zonas de concentración y dispersión invernales de la Unión Europea y la principal de la Comunidad Valenciana. Ese impacto sería crítico o incluso severo, es decir no compatible con la preservación de los valores naturales existentes y no sería posible su corrección con medidas compensatorias. Las Directivas Europeas exigen el no deterioro de los hábitats naturales y de los hábitats de las especies de los espacios de la Red Natura 2000, desde el mismo momento de su inclusión en los listados de propuestas de LIC o de declaración como ZEPA.

Finalmente consideramos que este proyecto de obras hidráulicas no está justificado suficientemente y no es un proyecto de interés general, y que en el Documento Inicial no se aborda de forma clara los motivos del inicio de la tramitación de este proyecto ni se justifica suficientemente su necesidad.

Por todo lo expuesto, rechazamos rotundamente la ejecución del mencionado proyecto por las graves consecuencias que tendría para la supervivencia de especies gravemente amenazadas, y que supondría una agresión más a las ya sufridas por este espacio natural asediado por diversos impactos como la urbanización desmedida del territorio (urbanización del PAU 21 de Orihuela), las líneas de alta tensión y las roturaciones ilegales.