Un estudio del Colegio de Geógrafos de España destaca el valor agroecológico e histórico de las huertas tradicionales del río Segura así como su sistema de riego por inundación, que “permite aprovechar en varias ocasiones” las aguas de drenaje. Ante ello se rechaza que el riego por inundación presente ineficiencia en cuanto al uso del agua. El documento “Análisis de los procesos de la agricultura en la cuenca del Segura”, realizado a instancias del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural, destaca la “complejidad” del regadío de huerta, implantado en época Andalusí (siglo VIII), ya que la distribución de caudales mediante acequias se completa con otra paralela de azarbes utilizada para recoger y canalizar los excedentes de riego.
La red de avenamiento, se indica, permite volver a aprovechar los caudales sobrantes aguas abajo en otras explotaciones con menos dotación de riego. El estudio no descarta que el sistema de inundación se pueda compatibilizar con el riego a goteo, que “puede ahorrar agua” pero “genera por contra significativos efectos ambientales y pérdidas en el patrimonio histórico y natural que afectan al paisaje de la llanura aluvial del Segura”. El documento advierte sobre la pérdida de las huertas de Murcia y la Vega Baja “a pesar de su elevada fertilidad, un recurso natural escaso y no renovable de evidentes valores ambientales”. Reseñar que el informe “Dobris” de la Comisión Europea de Medio Ambiente destaca el valor de las zonas de huerta, seis en toda Europa, y aconseja su protección y conservación.
La pérdida de este espacio agrario se debe al abandono de la actividad, a la urbanización e instalación de usos no ligados al aprovechamiento de la vocación agrícola, según recoge el Colegio de Geógrafos, que considera que más allá del valor productivo de los suelos, la degradación de las huertas implica la desaparición de uno de los paisajes más representativos mediterráneos que “están recibiendo una creciente consideración y valoración” de las autoridades europeas.
Las huertas, se indica, deben ser incluidas entre los paisajes de mayor significado a escala europea junto con los “bocages” atlánticos o los “open fields” de interior del continente. En este sentido se añade que la Convención Europea del Paisaje recoge que las huertas “están en la base de creación de culturas locales y constituye un componente fundamental en el acervo cultural y natural de Europa” por lo que su desaparición supondría “una merma difícilmente reparable para el patrimonio histórico europeo”. Para este colectivo no se trata de perseguir fosilizar paisajes del pasado, pero sí otorgar un alto nivel de protección, regulando usos y actividades.
Reseñar que colectivos agrarios y ciudadanos de la Vega Baja plantean solicitar a la UNESCO la declaración de la huerta como Patrimonio de la Humanidad.