El PP de Almoradí denuncia lo que considera “una nueva y escandalosa muestra de transparencia por parte de nuestro -incapaz- Alcalde y su coalición de minorías”. En este caso se explica que la segunda planta del Salón Cultural, donde se ubicaba la donación de doña Manuela Gimenez y Luís Martínez Rufete, “ha sido desmontada y arrinconada”.
Estado actual de la sala permanente
El PP dice suponer que “el señor Jaime Pérez, responsable de este nuevo disparate, debe estar al corriente de que el acuerdo firmado el 29 de noviembre de 2013 con la familia de don Luís obligaba a que los libros donados estuviesen convenientemente dispuestos en una sala especial que llevaría su nombre y el de su esposa, y de que en caso de que los familiares considerasen que se le estaba dando un mal uso podrían ponerlo en su conocimiento -como Presidente de la Corporación- para que tomara las medidas oportunas” Por ello, añaden “tendrá que explicar muy bien por qué ha consentido incumplir un acuerdo municipal y por qué no ha informado al resto de la Corporación de sus intenciones”.
Los populares de Almoradí indican que conocen la demanda existente de un aula donde poder estudiar las 24 horas -de hecho formaba parte de nuestro programa electoral y llevamos una propuesta concreta a Pleno- pero entendemos que la solución pasa por informar al resto de formaciones políticas y consensuarla con todos -también con los estudiantes-. En ningún caso saltándose un acuerdo municipal, y lo más grave, sin contar con sus herederos.
Denuncian por otro lado que “sabemos” que la figura de Luís Martínez Rufete no cuenta con la simpatía de la concejal María Jesús Pérez, pero las cosas no se hacen por la puerta de atrás en un arrebato,especialmente cuando se presume tanto de transparencia y democracia, y debemos destacar la importancia de su legado”.
Inauguración de la sala permanete
Al respecto se expone que el mismo consta de 2.888 ejemplares y 1200 DVDs, y que abarca desde libros de temática comarcal, a revistas antiguas de carácter generalista, publicaciones periódicas desde 1898 y muchos pequeños tesoros.
También, entre otros, revistas literarias del siglo XIX, una novela del escritor inglés Fielding datada en 1795, la ‘Historia de Amelia Booth’, obras de coleccionista como facsímiles de los grabados de la serie ‘Caprichos’ de Goya, ilustraciones de los albores del siglo XX o reproducciones de los libros de Astronomía de Alfonso X, por no citar ejemplares numerados del ‘Tratado de Geografía’ de Ptolomeo. También destacan quijotes ilustrados por Mingote y un tratado de Anatomía de Andrea Vesalio, que comparte protagonismo con otro sobre lengua árabe datado en 1848, que Rufete coleccionó por su afición a los libros y a las copias hechas con esmero de volúmenes universales.
“Nos preguntamos: ¿Puede ser más incapaz un Alcalde?” se expone desde el PP.
