Frente a una céntrica sucursal bancaria, dotada de un cajero automático situado en la vía pública, Cambiemos Orihuela ha presentado, a través de su edil Karlos Bernabé, una propuesta de ordenanza que cobre una tasa a los bancos por cada uno de estos cajeros situados en las calles del municipio.
Así, Bernabé ha querido exponer dos cuestiones. La primera es el, según la formación, “nefasto” sistema fiscal español: “España recauda a través de impuestos apenas el equivalente a un 32% del PIB, mientras que la media europea está en torno al 40%. Además, otros países que están soportando mejor la crisis, y tienen mejores indicadores de bienestar, rondan más del 45% de recaudación”, ha dicho. El concejal de Cambiemos insistió en señalar que, “a pesar de que en general se recauda poco, son las gentes trabajadoras y la ciudadanía la que soportan la mayor parte de la carga fiscal. Los impuestos sobre las rentas medias y los salarios, así como los impuestos indirectos sobre el consumo son excesivos”. En definitiva la coalición de izquierda ha querido denunciar que, “España recauda poco, y lo poco que recauda, la mayor parte recae en la gente corriente”. De ahí que desde la candidatura asamblearia urgen a abordar una “reforma fiscal real para que sean los más poderosos quienes más paguen, y no a la inversa, como aún sucede”. En ese sentido propondrán al consistorio oriolano que ese cambio también se dé a nivel municipal.
Posteriormente Karlos Bernabé ha querido hacer un breve repaso al denominado “rescate bancario” para justificar su propuesta: “desde el estallido de la crisis, las ayudas publicas directas a la banca privada se cifran en más de 61.000 millones de euros, si además, se contabilizan avales, respaldos de crédito, y otras ayudas indirectas, son, según los cálculos más conservadores, casi 300.000 millones de euros.”. Con ello han querido denunciar el modo en que diversos gobiernos del país, con las directrices de la UE, “han puesto los recursos públicos al servicio de los beneficios privados”. Todo ello mientras, tal como señalaba, “se han aplicado políticas de recorte, miseria y precarización para que sea la gente la que pague el juego de casino de unos pocos que se han lucrado”.
La propuesta de Cambiemos Orihuela, similar a la que ya se aprobó en la vecina Callosa de Segura recientemente, supondría el cobro de una tasa a las entidades financieras por instalación y tenencia de cajeros en la vía pública. Callosa estableció cobrar en torno a 1000€ por cada cajero situado en la vía pública como tasa al “aprovechamiento especial de la misma”, según Bernabé, la cuantía de la tasa para Orihuela no se podría determinar sin un estudio económico, pero, según afirma “no debería ser inferior a 1000€ por cada cajero”. El documento con la propuesta oficial presentado al Gobierno Local hoy en registro, sugieren 1.500€ como cifra orientativa.
“Con esta medida queremos lograr dos cosas. La primera es captar fondos de aquellos que más tienen, y que más se han beneficiado de la gestación y desarrollo de la crisis, y poner esos recurso al servicio de la gente”. De hecho, Karlos Bernabé ha apuntado que sería interesante que, con la cantidad de dinero recaudada a través de esta propuesta, abrir una línea de ayudas en materia de vivienda o necesidades sociales, para que “el rescate financiero se cambie por rescate ciudadano”. Pero, además, ha querido mandar un mensaje a las entidades bancarias: “queremos mandar también un mensaje político a los grandes bancos: Se acabó. Se acabó la complicidad institucional entre élites financieras y élites políticas, a partir de ahora, cada gramo de soberanía y de capacidad de maniobra de nuestras instituciones y ayuntamientos, tiene que estar al servicio de la gente y exigir a los más poderosos, a quienes más han engordado con la crisis, que es tiempo de adelgazar y de que ellos se aprieten el cinturón”.
A las doce del mediodía, tras la presentación por registro de la propuesta, Karlos Bernabé y Marta Guillén, han iniciado los trámites de su posible puesta en marcha, cuyo primer paso, según la ley, corresponde a la Junta de Gobierno, aunque no descartan elevarla a pleno como moción en caso de que como señala Bernabé: “el Gobierno la ignore o de que el Alcalde muestre, su tradicional galleguismo, decir una cosa y la contraria, como hace para casi todo. Aquí hay que posicionarse”, concluyó.