Una representación de LA UNIÓ de Llauradors; encabezada por su miembro de la Comisión Ejecutiva, Luis Javier Navarro y el responsable del sector de fruta, Damià Seguí; junto a otros miembros de su organización estatal Unión de Uniones, se encuentran hoy y mañana en Bruselas para trasladar a la Comisión Europea y los eurodiputados valencianos y españoles la necesidad de afrontar medidas para los productores de fruta, entre ellas el establecimiento de ayudas por el veto ruso.
Durante estos dos días se reunirán con Jesús Zorrilla, Jefe de Unidad del vino, espumosos, productos hortícolas y especializados de la dirección de la Organización Común de Mercado (OCM) única, economía y análisis de los mercados agrarios de la Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea; y con eurodiputados valencianos como Jordi Sebastià de Primavera Europea, y españoles para que defiendan en el Parlamento Europeo las propuestas de la organización para hacer frente a la grave situación de crisis que sufre el sector de la fruta de verano.
LA UNIÓ solicitará al señor Zorrilla, entre otras cuestiones, un seguimiento del mercado de la fruta y las hortalizas en las diferentes circunscripciones económicas de la Unión Europea, puesto que se necesitan mecanismos ágiles que permitan a la Comisión Europea detectar rápidamente y declarar situaciones de perturbación de mercado. LA UNIÓ propone al Jefe de Unidad y a los eurodiputados que cuando se detecten caídas de precios por encima del 30% de media la Comisión declare una situación de perturbación de mercado. En este caso, pide que la Comisión permita a las organizaciones de productores acordar estrategias conjuntas para paliar la situación de crisis como poder fijar volúmenes de producción y cantidades de retiradas a hacer, no comercialización de calidades inferiores.
LA UNIÓ reitera que cuando se trata de crisis graves de precios como ha provocado el cierre de las exportaciones a Rusia, medidas como retiradas del mercado, vendimia en verde o no cosechar son insuficientes, tal como pasó el año pasado después del veto ruso a la importación de productos de la Unión Europea del que los productores valencianos de fruta ni tan siquiera pudieron beneficiarse por estar la campaña prácticamente finalizada. Ahora las autoridades europeas ya han indicado que las ayudas finalizan el próximo 30 de junio. En este sentido LA UNIÓ propone que para estos casos se prohíba la comercialización de los calibres y categorías inferiores de fruta y se establezca un procedimiento que permita retirar producto del mercado por una vía diferente a la prevista para las ayudas de fruta y hortalizas, para no perjudicar las inversiones productivas de los programas operativos de las organizaciones de productores ni que ese posible hueco sea ocupado por fruta de procedencia extracomunitaria.
Otras propuestas que LA UNIÓ hará llegar al representante de la Comisión Europea y a los eurodiputados son la suspensión temporal de las importaciones de productos de países terceros y restituciones a la exportación.
