Los barrios de cuevas de Rojales ya cuentan con un nuevo aliciente. Un propietario de uno de estos habitáculos subterráneos, Adrián Mateo Aguado, adquirió recientemente una talla de Nuestro Padre Jesús que ha colocado en su cueva para que, cualquier ciudadano pueda visitarla y pedir “salud”. La imagen ha sido realizada por el escultor cordobés Manuel Luque y se trata de una talla de barro cocido y policromado al oleo.
El joven de Rojales de 24 años señala que se trata de un santuario particular pero abierto a cualquier persona que lo quiera visitar. Los motivos de la iniciativa, explica “es la salud, porque en mi familia siempre ha faltado y personas muy cercanas han fallecido jóvenes”.
El santuario recibió las primeras visitas el pasado domingo de numerosos vecinos de Rojales así como de los miembros de la Banda de Cornetas y Tambores La Flagelación de Guardamar (FLA) de la cual, Adrián Mateo es miembro.