Jesús Cañizares Alhama, Miembro del PSOE de Rojales.
ROJALES 24-07-2014
Hace algún tiempo, cayó en mis manos un excelente libro escrito por Jonh Locke que se intitula SEGUNDO TRATADO SOBRE EL GOBIERNO CIVIL. Este libro trata, entre otros asuntos, del deber ineludible que tienen los gobernantes elegidos de manera democrática y que la mayoría de las veces no cumplen en su justa medida.. Es evidente que cuando se hace una campaña electoral y se presenta un programa, éste debe ser cumplido, sino en su totalidad, sí en lo básico y fundamental para conseguir el bienestar de los gobernados. Y ahora se está haciendo justo lo contrario. En el año 1.690, Locke publica por primera vez sus DOS TRATADOS DE GOBIERNO. En estos tratados se leen asuntos como los siguientes: si la finalidad del gobierno es el bien de la humanidad, “¿qué es mejor para ésta: que el pueblo esté siempre expuesto a la ilimitada voluntad de la tiranía, o que los gobernantes puedan ser resistidos cuando hacen un uso exorbitante de su poder y lo emplean para la destrucción, y no para la protección de las propiedades (es decir, de las vidas, posesiones y libertades) de sus súbditos”?. Acerca de esta pregunta, Carlos Mellizo, dice: ” la respuesta es clara; siempre que alguien-y ese alguien incluye a los gobernantes-intente invadir por la fuerza los derechos de los demás, será culpable del mayor crimen de que un hombre es capaz y debe ser tratado como se merece”. Continua diciendo el autor del libro: ” la libertad del hombre en sociedad es la de no estar bajo más poder legislativo que el que haya sido establecido por consentimiento en el seno del Estado, ni bajo el dominio de lo que mande o prohíba ley alguna, excepto aquellas leyes que hayan sido dictadas por el poder legislativo de acuerdo con la misión que le hemos confiado.” Al primer entrecomillado, es evidente, según mi criterio, que hemos de contestar de manera clara y contundente: Sr. Presidente del Gobierno, disuelva el Parlamento, convoque elecciones y deje de decir lo contrario de lo que hace. Y al segundo: si se ha elegido al actual Gobierno español para que haga leyes de acuerdo con la misión para la que ha sido elegido y éstas se han publicado de manera contraria a lo que se afirmó en su programa de gobierno, la conclusión sigue siendo la misma: márchense, señores del Gobierno actual español, convoque elecciones y el pueblo decidirá quién quiere que lo gobierne. Como mínimo deberíamos elegir a un gobierno que a) cumpla con el programa que se presenta a las elecciones y b) que se nos diga, de una vez por todas, la verdad de la situación económica en este País. Es lo que la gran mayoría que todas y todos estamos esperando.